La voz perfecta del barítono. Así quisiéramos llamar a Dmitri Hvorostovsky, el fallecido cantante ruso nacido en Siberia en 1962 y quien dejó de existir en la ciudad de Londres en noviembre de 2017 en plena carrera profesional lamentablemente, a la edad de 55 años y víctima de un enemigo tan poderoso como es el cáncer.
Homenaje a su perfección
Como homenaje para quien cantó en todos los foros operísticos importantes desde su debut en 1989 en Londres, y también como gusto para nosotros, escúchenlo en una de las arias que mejor dominaba, Largo al Factótum, de la ópera El Barbero de Sevilla, del compositor italiano Gioachino Rossini. Habíamos dicho en otra ocasión aquí en Salkedus, un aria es una canción para cantante solista, que forma parte de una ópera, destacándose por lo exquisito y lo exigente al momento de ser cantada.
Llegó el barbero…
Para esta ocasión, una aria cuyo nombre significa ‘abran paso al especialista’, representa el momento cuando el barbero de nombre Fígaro, uno de los protagonistas de la ópera, llega a una calle de Sevilla con toda su parafernalia, para ofrecer sus servicios: tintes, cortes, afeites, uñas, etc., a transeúntes y vecinos.
Oiga señor Fígaro…
Por eso dice una parte del texto cantado: “Uno alla volta, uno alla volta…”, o sea, uno a la vez, uno a la vez, pues dado su prestigio profesional, la gente llamándole lo colma, disputándose sus servicios. Y también oímos el libreto cuando el personaje dice o canta, mejor dicho, Fígaro lá, fígaro quá, fígaro sí, fígaro no…. Se trata del propio barbero Fígaro imitando los gritos de su clientela, llamándole exigiendo ser atendida.
Otros detalles, como qué es un barítono, un aria, una ópera, etc., vean la siguiente entrada: La Donna è Mobile
Hoy disfrutemos la voz perfecta de Dmitri Hvorostovsky en pleno dominio de esta aria, cuando su voz fue respaldada por la Orquesta Sinfónica de Montreal, bajo la dirección de Charles Dutoit en 1998.