Se van los años pero quedan las décadas… Quedan para siempre Los Escarabajos, o sea The Beatles. Y una de sus más famosas canciones: Hey Jude. Nos damos una pasada por emisoras de radio; o por canales de televisión. O se da una pasadita por Wiki, ahora, buscando buena música, “la Música que Vivirá por Siempre”; el “Ayer y el Hoy”; y encontramos, organizada por décadas, notas, artículos o crónicas acerca de la música popular, en español o inglés casi toda; alguna en francés, italiano…
Pero como The Beatles, no hubo, no hay…
Siempre hay al menos un locutor, un periodista, un conocedor, alguien versado hablándonos de grandes cantantes o agrupaciones y sus éxitos, lo mejor o más conocido por su calidad y aceptación ante el gran público. Se oye y se lee entonces, acerca de la década de los cincuenta, y su inolvidable Elvis Presley.
Y por supuesto, sobre décadas posteriores, cada una albergando canciones conocidísimas e inolvidables. Y de cada década, un centro de atención. Si para la de los cincuenta fue sin duda alguna el mencionado rocanrolero, para la de los sesenta lo fueron los por siempre aclamados escarabajos de Liverpool, The Beatles. Los /bitles/, oímos. Llegaron a la cima, difundieron el pop y el rock por el mundo y virtualmente crearon una forma de expresión musical urbana.
Con todo y guerra
De escenario tuvieron un mundo dividido económica y políticamente, un mundo pendiendo de la posibilidad de un enfrentamiento entre dos bloques hegemónicos, representados por EEUU y la URSS (Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas) y sus respectivos países satélites o aliados; unos del lado de la democracia moderna capitalista; el otro del lado de sistemas totalitaristas y comunistas.
Era la era de la Guerra Fría, es decir, se vivía bajo permanente tensión por la posibilidad o amenaza de una nueva guerra internacional, que pudiera desencadenarse tras cualquier movimiento de cualquiera de estos dos imperios. La década fue de protagonistas o líderes como Martin Luther King, John F. Kennedy, Nikita Jruschov (Khrushchev), Fidel Castro…
Después de finalizada la Segunda Guerra Mundial, el mundo vio su peor punto de amenaza con la llamada Crisis de los Misiles, cuando la URSS puso cohetes o misiles con cabezas nucleares en sus bases de Cuba, su mejor satélite en América. Sucedía eso.
Dos guitarras, un bajo, un piano y batería
Y sucedía que The Beatles lanzaba al mundo su ritmo, trajeados formalmente de negro, cabellos largos como no se llevaban hasta ese entonces; y apenas cuatro o cinco músicos, con dos guitarras, el bajo, la batería de tambores y a veces un piano.
Y el mundo se llenó de sus trinos numerosos: Don’t Let Me Down; Yesterday; A Day in the Life; Eleonor; Come Together; I Saw Her Standing Here… Muchos de ellos en versiones en otros idiomas e interpretadas por grupos en cada país.
Sus integrantes: Paul Mc Cartney, Ringo Starr, John Lenon y George Harrison. Aunque también estuvieron en los inicios de la agrupación, Pete Best y Stuart Sutcliffe, olvidados prontamente como miembros que fueron. El grupo distribuyó su talento dejando a Lenon la guitarra acompañante y la voz líder; a Mc Cartney le correspondió bajo, voz y piano. Harrison era guitarra solista o melódica y voz también. Y detrás de ellos se sentaba Ringo Starr con la batería, aunque igualmente hacía coros.
Hey Jude y Salkedus
Hablar de ellos nos llevaría días y semanas. Aquí me limito a recordarlos – no los presento por ser innecesario totalmente – con estas escasas palabras en nuestro blog, el blog de la mejor música y las mejores letras, que esta semana viste de gala para invitarles a escuchar una de sus más conocidas y más hermosas piezas, Hey Jude, canción compuesta por Lenon y Mc Cartney, hablándonos de la vida y como consuelo para Julián, el hijo de Cinthia Powell y Lenon, después del divorcio de sus padres.
Con ellos, con The Beatles, Hey Jude: