José Carreras, su voz y el tema cantándole a palacios ducales y a jardines reales, a los muros de la soledad y de la espera infértil cuando la tierra y el amor ya no pudieron. Y entonces se expresan todos como el vino rojo tristón del recuerdo y de los amores no posibles ya, dibujados en los secos pétalos de una marchita rosa cuyo comienzo siempre fue triste en medio de su albo color. José Carreras nos presta su versión meliflua del Concierto de Aranjuez… Pueden disfrutar de otra de nuestras entregas al clic en el enlace: La Donna è Mobile Aranjuez, la ciudad española testigo mil veces de amores…